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Conjunto de 10 edificios de la misma propiedad. Se presentaron dos de las cubiertas a concurso y una fue elegida, pero la idea es hacerlas todas. Al tratarse de un edificio protegido de clase dos hay resticcions en lo que se puede y lo que no se puede hacer. El pavimento original se ha pulido y sobre él se ha colocado una capa de EPDM, un geotextil, una huevera, un geotextil y encima sustrato formado por triturado de ladrillos mezclado con sustrato orgánico. El relieve es muy irregular en toda la terraza. Aprovechando esta realidad se dispone el sustrato con profundidades variables y con dos sistemas de riego a diferente profundidad. El sistema de riego está formado por una tubería con orificios hechos por abrasión del material, lo que crea una agujero rodeado por una membrana, donde el espesor es muy delgado. Al salir del agua hace vibrar la membrana hacia fuera. Este movimiento expulsa las raíces que puedan penetrar. La plantación incluye muchas especies herbáceas (autóctonas la mayoría) y arbustivas en maceta, aunque también los hay en sustrato. Se han instalado hotel de insectos, cajas nido y balsas. Se han definido espacio de estancia con un banco de obra integrado y muro de madera para delimitar zonas de maquinaria. El camino forma un anillo perimetral. Tiene zonas de recreo, tendederos, terrazas y huertos urbanos, accesibles para toda la comunidad de vecinos: las 11 viviendas de este edificio y los del resto de la manzana. Incorpora recogida de aguas pluviales, generación de electricidad con placas fotovoltaicas y una zona de compostaje a partir de residuos orgánicos; todo para el autoabastecimiento de la propia cubierta verde.