• 
• 
• 
• 
• 

El claustro de la Basílica de la Purísima Concepción encontramos un jardín privado pero que es de acceso libre a todo el que lo quiera visitar en horario de apertura.
Se trata de un espacio bien cuidado, donde domina una sensación de frescura y tranquilidad y se siente poca ruido, teniendo en cuenta su ubicación en una calle con bastante tráfico. Destacan el sonido de la fuente que se encuentra ubicada dentro del jardín y los pájaros que viven y anidan.
Predominan especies exóticas, entre las que destacan tres árboles: dos grandes magnolias situadas en medio del jardín y una palmera datilífera centenaria, plantada en recuerdo de la que cantó en una poesía su padre Jacinto Veragua, "La Palmera de Jonqueres". Estos árboles son de un gran interés por su tamaño, pero encontramos otras especies, como un mandarino, un cerezo, guayaba de jardín (Psidium littorale), jazmín de noche, Cestrum de olor (Cestrum nocturnum), Ophiopogon japonicus, Cintas (Chlorophytum comosum).
También se pueden encontrar algunas especies autóctonas como el boj, el palmito o la hierba Adiantum capillus-veneris.
Observan gorriones y mirlos.